En la pirámide de Huanca Cao Viejo, se descubrió la tumba de una princesa o de una aristócrata muy alta, llamada la Señora de Coa, tatuada por todo su cuerpo. Allí se han descubierto innumerables objetos preciosos, tanto materiales como históricos: símbolos de poder, joyas, amuletos, armas de guerra... Parece que su papel en la sociedad ha sido una responsabilidad muy alta, una especie de Hatshepsut peruano.